En las Soledades de Góngora, un joven de alta nobleza, náufrago y errante, deambula durante cuatro días por un mundo rural hospitalario que vive en una paz gozosa e inalterable. A primera vista estamos en un régimen radicalmente alejado del registro épico, y sin embargo Mercedes Blanco, en un estudio que apenas tiene antecedentes ni paralelos en la crítica anterior, demuestra que en este poema puede verse la respuesta del poeta andaluz a lo que Torquato Tasso había llamado «poema heroico». En este fascinante diálogo se pone en relación la obra de Góngora con las de Pontano, Poliziano, Sannazaro, Ariosto y Torquato Tasso, considerando también el fondo común de la épica clásica y las lecturas de Homero en el Renacimiento. En la lengua poética de este último Góngora halló técnicas favorables a una escritura que constituye el mundo como paisaje en un sentido cercano al del género pictórico. A la tradición épica remite asimismo el «discurso de las navegaciones», un fragmento de la Soledad primera que incluye un paradójico mapamundi sin topónimos y ofrece una síntesis de los ejercicios meditativos que suscitó la revolución geográfica de la era moderna. La operación creativa de la que resulta el poema puede describirse como un desplazamiento de la proeza heroica desde la acción contada hasta las acciones de escribir y de leer, mediante la invención de una lengua repleta de aventuras y de riesgos. Con un ejercicio que moviliza todos los recursos de su imaginación y de su inteligencia, el lector de las Soledades es invitado a adivinar la guerra, su gloria y sus calamidades como por transparencia, bajo una imagen radiante de la paz. Mercedes Blanco es catedrática de Literatura Española en la Sorbona. Es autora de un centenar de estudios y ensayos sobre la literatura del Siglo de Oro, y en especial sobre Gracián, Quevedo y Góngora, donde se interesa por cuestiones estéticas y formales, combinando la tarea de desentrañar los detalles del texto con una consideración de amplios conjuntos teóricos e históricos. Destacan Les rhétoriques de la pointe. Baltasar Gracián et le conceptisme en Europe (París, 1992) y el reciente Góngora o la invención de una lengua (León, 2012).